9ª y 10ª jornadas de Liga Madrileña 2014/15

  Muy buenas a todos, propios y amiguetes del blog.

  Negros nubarrones se cernían en el día de ayer para nuestro primer equipo, ya que nos tocaban dos de los "cocos" del grupo, ni más ni menos que el primer equipo de Siglo XXI y tras ellos, el equipo de 2ª de Boliches, ahí es nada.

  Pensando en la que nos íba a caer, decidimos hacer el esfuerzo de madrugar y tomar nuestro desayuno de rigor, unos churritos, unas porras y nuestra leche con cacao en polvo, para que endulzara el posible varapalo que íbamos a sufrir.

  ¿Nuestra meta?, rascar de cualquier sitio, todo punto era bueno, nuestra misión era llegar con opciones a la última jornada antes de los play offs de ascenso/descenso, en la que nos jugaremos el sexto puesto que da lugar al play off de ascenso contra BAT, el cual ayer tenía una jornada dulce, y preveíamos que caerían muchos puntos (como al final así fue, los 36 de los fantasmas más los 32 que consiguieron contra Rockandbowling).

  Aun con la importante baja de nuestro líder, Marta, Jose, Juan y yo teníamos que hacer frente a las 8 partidas de hoy. Sabiendo que teníamos mucho que ganar y muy poco o nada que perder, nos presentamos en la bolera con tiempo para coger las bolas, cambiarnos, y calentar un poquito antes de las bolas de prueba.

  Mientras que nuestro equipo y SXXI tenían que calentar menos que el resto, porque nuestras pistas aun no estaban terminadas, nuestro club fue apercibido porque uno de nuestros miembros llevaba un polo distinto al resto, lo que aceptamos porque así lo marcan las reglas (si bien me parece más grave no poder calentar lo mismo que el resto, pero no deja de ser una opinión personal)

  Y así comenzaba todo. Primeras bolas, primeras sensaciones y un sentimiento común, "arrimemos el hombro que cualquier punto es importante".

  Tras la primera partida, Jose y Marta (verdadera protagonista del enfrentamiento contra Siglo XXI), dejaban su impronta llevándose los 4 primeros puntos, un grano no hace granero pero ayuda al compañero. 

  Entonces llegaba el "momento" del día. Todos los miembros del equipo, concentrados al máximo, jugando a nuestro mejor nivel, trincamos otros 6 puntos, ganando 3 de los 4 enfrentamientos, tirando todos por encima de 199, Juan202, Jose 200, yo 202 y Marta, respondiendo con un pleno cada uno de los 5 plenos seguidos que el capitán del equipo rival consiguió hacerla, y no contenta con ello, haciendo 1 más que él, -redobles de tambores-,  bajo la mirada atónita de cada miembro del equipo rival (no del nuestro porque sabemos de sobra lo que la francotiradora es capaz de hacer), tumbó a su oponente con un 221 frente a 211. Qué deciros de ella, que anima a los demás como la primera, que se mantiene en un segundo plano, sin hacer ruido, dando protagonismo al resto, pero mostrando no sólo que cada día juega mejor, sino que tiene una capacidad para competir envidiable, y que sin hacer números, no me extrañaría que fuera la que más puntos ha sumado al equipo. Son tantas las veces que he dicho aquí que estoy superorgulloso de ella en las dos facetas, personal y bowlística, que se me acaban los calificativos. ¿Y qué decir del equipo?, una partida de 825, record del equipo, 206,25 de media, estoy empezando a pensar que no tenemos límites, que estamos en nuestro segundo año de competición -no nos olvidemos de ello-, y que hay equipos que llevan muchos más años y aun no han sido capaz de jugar una partida así.

  Voy a hacer un paréntesis en este momento, y es que ya no es que me sienta orgulloso de todos y cada uno de vosotros, sino que Enrique, Marta y yo, llevamos muchos años juntos, y sabemos la clase de personas que somos, dato éste que nos ha hecho inseparables. Pero no sabéis la alegría inmensa que me da, contemplar a nuestros dos compañeros más nuevos, Jose y Juan, como disfrutan jugando, cómo nos hacen disfrutar al resto con su sentido del humor y con su forma de ser, parece que este equipo llama a las buenas personas, y el universo se encarga de hacerlos llegar. Y por si esto fuera poco, están jugando a un nivel envidiable, dándolo todo en cada jornada, ya tengan lesiones, problemas de cualquier tipo, etc. Jose, Juan, de veras que me alegro haberos conocido y espero que estemos juntos muchísimos años más, ya que personas como vosotros, no son fáciles de encontrar, y como tales, os vamos a tratar. Un abrazote a los dos.

  Continúo con lo que estaba contando que me disperso con los sentimientos y no puede ser, -vais a pensar que soy un pastaflora-. Llegaban las parejas (ya con 10 puntos a nuestros hombros, lo cual aseguraba un buen resultado aun perdiendo el resto). Pero mis chicos no conocen límites, y de las dos primeras parejas, Juan y Marta, con 185 de media, nos dieron 4 puntitos más, lo que nos aseguraba acabar casi empatados (increíble). Aun había más, quedaría una sorpresa de última hora, no queríamos mirar cómo íbamos en el cómputo global de los palos, pero intuíamos que, tras la segunda partida de equipo y teniendo en cuenta que en las otras dos, las diferencias no habían sido grandes, debíamos ir con algo de ventaja, lo que nos obligaba a hacer una buena última partida para que no nos pudieran recortar esa diferencia. Fue entonces cuando llegó mi momento.

  El resumen de lo que había hecho hasta ese momento, era sencillo, había aportado 1 punto...o ninguno al equipo, tras perder mis dos individuales y el de parejas. Fue entonces cuando llegó uno de esos momentos que te regala el bowling de vez en cuando. Última tirada de todas, nuestros rivales nos sacaban 12 palos de diferencia, lo que me obligaba a, por lo menos, marcar. Primera bola al pocket, ligéramente más abierta de lo óptimo, y el diez, ni corto ni perezoso, se queda más tieso que una vela. Ahí estaba el "momento adrenalina" tirar el palo para poder tirar tres palos más en el tiro siguiente que te da derecho el semipleno, para ganar la eliminatoria 22-14 o no tirarlo y terminar empatados a 18.

  Cogí la bola de remate con mensajes en la mente de "Carlos, es un remate más, no pienses más allá", cogí la bola y sin más dilación, para no pensar demasiado, emprendí el primer paso del timming hacia la linea de falta, solté la bola, sorprendentemente con bastante más tranquilidad de la que me supondría a mí mismo en un caso similar), y sabiendo que, por el camino que la bola había tomado cumpliría mi objetivo, me dirijí hacia el retornabolas para preparar el siguiente lanzamiento en lo que escuchaba como el maldito 10 yacía en las tablas tras el impacto. El siguiente tiro sólo había que conseguir mantener la bola lejos de los carriles, y, cuidando de no darme en la pierna, solté la bola de nuevo, sabiendo que tocaría el primer bolo lo que supondría la victoria del equipo y mis primeros puntos de la jornada.

  Los palos, como bien presagiábamos, acabaron en +50 para nuestro equipo, lo que supuso acabar 22-14. Habíamos ganado a un equipo que fundó la AECB y cuyos miembros, tienen más partidas a sus espaldas que todos nosotros juntos. ¿Es o no es para aplaudir?.

  Yo sé perfectamente porqué ha ocurrido esto, no es por otra cosa que por entrenar, por jugar con humildad sin renunciar a nada y porque creemos en que podemos mejorar como así hemos hecho. No dejéis que las opiniones ajenas, que explican este triunfo mediante las supuestas velas que le hemos puesto a no sé qué Virgen, os convenzan, porque si esto pasa es por lo que valéis, e id pensando que a partir de ahora, va a empezar a ser más corriente, sé que vais cada día a más y que tenéis hambre de triunfo lo que os hace aun más fuertes.

  Chicos, mi más sincero reconocimiento. ¡Os quiero!.

  El siguiente enfrentamiento tiene menos historia. Jugábamos contra boliches, y eso son palabras mayores. Comentar que si ese equipo está en 2ª división es porque no puede haber 2 equipos del mismo club en primera, ya que si no, ambos coparían los 2 primeros puestos de la categoría reina.

  Tan sólo trincamos 6 puntitos, tres individuales, en tres despistes suyos y tres partidas buenas nuestras. Quizá destacar  que para 2 de esos puntos, hubo que superar un 221, para que os hagáis una idea de contra quién estábamos jugando. De hecho, no fué un 26-10 por un maldito bolo que se le quedó en pié a Marta en la última partida de parejas. Pero a ver quién es capaz de decirle algo a nuestra compañera, después de la demostración de competición y juego que lleva mostrando durante toda la temporada, lo único que sacamos en claro con eso fue una cosa: ¡ES HUMANA!.

   Lo dicho chicos, sois el equipo que soñaría cualquier capitán, en serio os lo digo.

  Un besazo para Marta y un abrazote al resto.

  Carlos.